Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

viernes, 29 de junio de 2018

Cuando dos remolinos se unen

Por Matraquito91

Un remolino es un gran volumen de agua giratorio producido por mareas oceánicas. Ahora, los remolinos marinos son cuerpos de agua que giran, rápidamente, sobre sí mismos. Pero, ¿qué sucedería si le digo que existen remolinos dobles capaces de arrastrar todo a su paso?

Pues sí, el Mar de Tasmania, en Australia, es el lugar donde oceanógrafos de la Universidad de Liverpool descubrieron algo insólito: inmensos remolinos dobles. Y digo que descubrieron algo insólito porque, aunque los científicos sabían que, teóricamente, este fenómeno podía producirse, hasta la fecha, nunca lo habían visto (a no ser en experimentos realizados al interior de un laboratorio).

Según explican los autores del descubrimiento, los remolinos marinos suelen desplazarse siempre en dirección al oeste. Pero, raras veces, se forma lo que se conoce como modones, que consiste en cuando dos de estos remolinos se juntan girando en espiral, formando una gigantesca masa de agua que puede extenderse a lo largo de varios kilómetros. Es entonces que el enorme remolino doble, resultante de la unión antes expuesta, puede cambiar su rumbo y girar hacia el este.

No obstante, y como ya se ha dicho, los expertos nunca habían podido observar este fenómeno en la propia naturaleza. Hasta ahora, cuando gracias a las imágenes por satélite, los investigadores británicos hallaron uno de estos remolinos dobles cerca de las costas de Australia.

Pero, ¿qué tan común resulta este fenómeno natural? Para tratar de averiguarlo, los especialistas revisaron imágenes por satélite de un año escogido al azar, concretamente el de 1993. Y el resultado fue que descubrieron nueve modones, ocho de ellos en el continente de Oceanía y uno en la costa de Suráfrica.

No obstante, todavía se desconoce, claramente, cómo se forma este tipo d evento marino. Aunque si se tiene la certeza de que cuando dos remolinos chocan, sus colas se entrelazan formando debajo de ellos una especie de U que les permite permanecer unidos durante varios meses sin deshacerse. Es allí que se produce un «agujero negro oceánico», que succiona todo lo que le pase cerca.

Cabe destacar que satélites han estado registrando estos fenómenos arremolinándose debajo de ellos durante al menos un cuarto de siglo, pero nadie se había dado cuenta de lo que eran. Y es que si bien aún existen muchas lagunas acerca de este fenómeno, parece que vamos en el camino correcto, hacia el conocimiento del entorno que nos rodea, ese que nos sorprende una y otra vez.