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lunes, 2 de julio de 2018

Villas y castillas por un castillo

Por Matraquito91

Rescatar el pasado a través de sus edificaciones constituye el afán de muchas personas en el Viejo Continente, las que se unieron para salvar un castillo que se hallaba en ruinas. Pero ya no más. Se trata de la fortaleza de La Mothe-Chandeniers, que ha sido rescatada mediante una campaña de «crowdfunding» que recaudó nada más y nada menos que 1,6 millones de euros. Esta antigua edificación, situada en el centro de un lago artificial, de la ribera del Loira, en Francia, y llamada el castillo de La Mothe-Chandeniers se acaba de convertir en el símbolo más imponente del micromecenazgo (financiación colectiva).

Esto gracias a una campaña de crowdfunding, donde 18 632 internautas de 115 países adquirieron esta fortaleza erigida en el siglo XIII tras recaudar 1,6 millones de euros, convirtiéndola así en la propiedad patrimonial colectiva más grande del mundo. Y lo hicieron a través de la campaña «Adopto el castillo de La Mothe-Chandeniers», lanzada a través de la web de la empresa emergente francesa dartagnans.fr, la cual ha superado, con creces, las expectativas con esta iniciativa global.

Esta fue difundida hace casi tres meses y finalizó el 25 del pasado diciembre, superando tres veces el objetivo inicial ya que el precio del castillo ascendía a 500 000 euros.

Como parte del proyecto cada uno de los donantes, que ofreció al menos 50 euros, podrá decidir sobre el futuro de su pertenencia, por medio de una sociedad que será la propietaria del edificio. Dicha sociedad funcionará a manera de democracia, con un comité ejecutivo, una asamblea general anual y un comité de dirección. «Era la primera vez que se proponía la compra colectiva de un monumento y el éxito fue histórico», aseguró a la Agencia EFE, Roman Delaume, quien funcionó como responsable de la operación en la web especializada en financiación popular.

Cabe recalcar que, por vez primera, un proyecto de este tipo propone a los «mecenas» convertirse en copropietarios de un palacio, que podrán gestionar desde sus hogares en EE.UU., Afganistán o Burkina Faso, entre otros países, todo a través de una plataforma corporativa. Además, no se trata de cualquier castillo sino de La Mothe-Chandeniers, el cual ha sido testigo de la historia de Francia desde hace ocho siglos, pasando por muchas manos.

Muestra de ello el abandono que sufría que lo llevo a quedarse sin tejado y con una frondosa vegetación que se había apoderado de cada rincón del histórico y bello espacio. Pero todo pasará muy pronto y este castillo volverá a recuperar su esplendor.

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