La violencia de género ha robado otra vida
Después de que Juana Mendoza fuera quemada viva por su cuñado en otro feminicidio brutal en Perú, el gobierno dice que está tomando medidas para sofocar las tasas históricas de crímenes contra las mujeres en el país, que zona alarmantes y que no han cesado pese a los programas educativos del Ministerio.
La ministra de Mujeres y Poblaciones Vulnerables de Perú, Ana María Mendieta, se reunió con la prensa en una conferencia esta semana para anunciar una red de apoyo diseñada para ayudar a prevenir futuras tragedias derivadas de la violencia doméstica contra las mujeres. En un programa coordinado con otros ministerios desde la administración del presidente Martín Vizcarra, la nueva medida busca establecer una comisión de emergencia que ayude a prevenir, asistir y proteger a las víctimas de la violencia doméstica, que se está cobrando muchas víctimas en el Perú, y su estado ya es alarmante.
El propio presidente Vizcarra también confirmó que se gastarán más recursos económicos del gobierno en tales medidas preventivas porque los sucesos lastimosos no terminan, no cesan, ni siquiera disminuyen. Dijo en un discurso público que se invertirán unos 6,11 millones de dólares en 50 centros de emergencia para mujeres en estaciones de policía participantes, según reflejaron los medios de prensa de ese país andino. "No más muertes", dijo el mandatario en un discurso a la nación desde el Palacio de Gobierno. "No más violencia contra las mujeres", recalcó en un llamado al cese de la violencia machista en el país andino.
Tras el ataque de este julio a Mendoza en Cajamarca y el posterior arresto de un sospechoso, los funcionarios del gobierno están siendo presionados para que actúen ahora mientras el enojo público y las protestas se han desarrollado con los feminicidios notables que ocurren este año."Expresamos una condena absoluta contra la violencia brutal de estos actos, como es el caso de Juana Mendoza, que es víctima de feminicidio", dijo Mendieta. "Tenemos un compromiso específico para enfrentar este problema con medidas concretas para prevenir más violencia contra las mujeres", agregó.
El presidente Vizcarra ha sido criticado recientemente por su aparente enfoque arrogante en uno de los temas más apremiantes de Perú, después de que dijera en público que "a veces así es la vida" al abordar el ataque brutal a Eyvi Ágreda que condujo a la muerte de la joven. No obstante, ahora presionado por los acontecimientos sucesivos, y de que su país, es de los más alarmantes en cuanto a cifras de asesinatos de mujeres, Vizcarra salió a dar la cara de otra manera. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, Perú es uno de los tres países más letales del mundo para las mujeres, así que las cifras aumentan, y el trabajo para combatir los hechos, sigue pareciendo poco.